Accidentes con siniestro total

El término “accidente con siniestro total” hace referencia a un accidente de tráfico en el que el vehículo resulta dañado
de tal manera que la reparación no es viable o su coste supera el valor venal del mismo.
Desde el punto de vista médico, lo importante no es el estado del vehículo
en sí, sino que un siniestro total suele implicar un accidente de alta energía,
lo que condiciona el tipo y gravedad de las lesiones.

Características de los accidentes con siniestro total

 

  1. Alta energía del impacto
  • Suelen implicar colisiones frontales, laterales o vuelcos.
  • Pueden participar varios vehículos o uno solo que colisiona contra un obstáculo fijo (poste, muro, guardarraíl).
  1. Alta probabilidad de lesiones múltiples
  • Debido a la magnitud del impacto, los ocupantes suelen sufrir politraumatismos.
  • Mayor probabilidad de atrapamiento y necesidad de rescate por bomberos.
  1. Influencia de elementos de seguridad
  • El uso del cinturón, airbags, reposacabezas, y estructura del habitáculo influyen directamente en el patrón de lesiones.
  • Si el habitáculo se deforma, el riesgo de lesiones graves o mortales aumenta considerablemente.
  1. Accidentes frecuentes en carretera o alta velocidad urbana
  • Suelen suceder en vías rápidas o cuando hay condiciones de mala visibilidad, alcohol, fatiga o distracción al volante.

Los pacientes tras un siniestro total suelen presentar múltiples lesiones combinadas, muchas de ellas graves y con secuelas permanentes.

 

 Ortopédicas / Musculoesqueléticas

  • Fracturas múltiples: pelvis, fémur, húmero, columna vertebral.
  • Fracturas abiertas o conminutas.
  • Amputaciones traumáticas.
  • Luxaciones graves.
  • Artrosis postraumática, rigidez o limitación funcional articular.

 

 Neurológicas

  • Traumatismo craneoencefálico (TCE) moderado o grave.
  • Hemorragias intracraneales.
  • Lesiones medulares con paraplejia o tetraplejia.
  • Alteraciones cognitivas permanentes.
  • Secuelas neuropsiquiátricas (déficit de memoria, atención, etc.).

 

 Torácicas y Abdominales

  • Neumotórax, hemotórax.
  • Contusión pulmonar o cardíaca.
  • Lesión hepática, esplénica o intestinal.
  • Fracturas costales con dolor crónico.

 

 Estéticas / Cutáneas

  • Cicatrices quirúrgicas, quemaduras, desfiguración facial.
  • Secuelas estéticas relevantes (rostro, manos, cuello).

 

 Psicológicas

  • Trastorno por estrés postraumático (TEPT).
  • Depresión, ansiedad.
  • Miedo a conducir (fobias específicas).

 

 

  • En un accidente con siniestro total, es frecuente que haya:
  • Incapacidad laboral parcial o total (temporal o permanente).
  • Secuelas funcionales y estéticas importantes.
  • Gran número de días de curación, hospitalización y rehabilitación prolongada.
  • Se valora conforme al Baremo de accidentes de tráfico español (Ley 35/2015).
  • Puede haber perjuicio moral por pérdida de calidad de vida, necesidad de ayuda de tercera persona, o incluso gran invalidez.

 

Los accidentes en transporte público (como trenes, autobuses, tranvías o metros) tienen un perfil clínico y médico-legal específico, ya que combinan el movimiento masivo de personas con situaciones de riesgo colectivo. Aunque menos frecuentes que otros accidentes de tráfico, cuando ocurren, pueden producir lesiones múltiples y graves.